Parroquia del Niño Dios

En el año 1906 los jesuitas toman posesión de la Estancia La Quinta, como consecuencia de la donación efectuada por la Señorita Eugenia Galarraga, establecimiento que formaba parte de la histórica Estancia de San Roque.

Con el paso de los años, el sacerdote Don Juan Cherta le otorga a este establecimiento el nombre de Quinta del Niño Dios, con el cual hoy aún se la conoce. Su construcción data del año 1915 y fue bendecida en el mes de Enero de 1933 (año santo de la Redención) por Monseñor Laffitte, Arzobispo de Córdoba.

Su administración estuvo a cargo del Hermano Antonio Font, quien le otorgó un decidido impulso a la Estancia, fomentando las tareas agroganaderas, con el fin de abastecer las necesidades alimenticias de los integrantes de la orden de los Padres Jesuitas en la Ciudad de Córdoba, así como la de los estudiantes que acudían en gran número a pasar el verano en aquel todavía pequeño pueblo serrano. Ello posibilitó la radicación de numerosas familias que trabajaban en las tareas que había fomentado el Hermano Font, muchas de las cuales se radicaron en la zona y se convirtieron en los primeros pobladores de Villa Carlos Paz.

Vitrales

Los Jesuitas dejaron en nuestra ciudad testimonios de religiosidad que todavía hoy pueden ser visitados, como los vitrales en el interior de la Iglesia del Niño Dios.